Sant Joan celebra la novena edición del Mercado campesino Arrels el domingo 13 de enero.
Este mercado tiene como objetivo impulsar las iniciativas productivas agroecológicas y de pequeña escala de nuestras comarcas, las que, según los principios de la soberanía alimentaria generan empleo revalorizando la vida rural y respetando nuestras tierras.
El “mercat de la Terra” Arrels, que ya va por su novena edición, se celebrará este próximo domingo 13 de enero en la plaza del ayuntamiento de San Juan, en horario de 10 a 15h.
Este mercado, al que ya los ciudadanos y cuidadanas de San Juan están habituados, surge como una iniciativa de la Plataforma por la Soberanía Alimentaria de Alicante y del sindicato agrario COAG (Coordinadora de Organizaciones Agrarias y Ganaderas) dentro de su programa europeo ARCO, que busca apoyar los circuitos cortos de comercialización de productos agrícolas. Los “circuitos cortos” son aquellos en los que no hay intermediarios que puedan aumentar el precio final, lo contrario a lo que estamos acostumbrados cuando compramos, por ejemplo, en supermercados.
Este mercado tiene una excelente acogida y hasta junio tendrá un lugar mensual en San Juan los segundos domingos de cada mes en el horario mencionado; un espacio para los productores y elaboradores que utilizan técnicas y procesos respetuosos, obteniendo productos libres de químicos, comercializando de manera directa y obteniendo así un precio que les permita vivir de esta actividad y permita además al consumidor obtener a precios asequibles productos de excelente calidad y de la tierra.
Además durante el mercado Arrels se crea un ambiente muy particular en la plaza, con actividades para niños, música, gente de todo tipo que compra, charla, degusta productos auténticos….
En el mercado Arrels se encuentran desde frutas y verduras, hasta pan y repostería, pasando por turrones, comida preparada, aceite, vinos y cerveza o productos de cosmética natural. La oportunidad de comprarlo directamente a las personas que los producen permite conocer todo sobre su proceso de producción y elaboración, favoreciendo un intercambio entre productor y consumidor que, hoy en día, se ha perdido en nuestra vida cotidiana. Todos los productos son de temporada y en muchos casos las frutas y verduras son variedades que tradicionalmente se han sembrado en nuestros huertos y que vienen desapareciendo a causa de la agricultura industrial, mucho más sabrosas que las que encontramos habitualmente en las estanterías de los supermercados. Y todo producido sin químicos y en nuestra tierra, sin trucos. Una propuesta transformadora que da a los ciudadanos la oportunidad de apoyar lo propio y lo cercano, redescubriendo sabores y conversaciones que acercan el campo a la ciudad.